Una misión de la NEPAD llega a Guinea Ecuatorial para analizar la situación de la Agenda 2063 de la Unión Africana

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 Una delegación de la Agencia de la Unión Africana para el Desarrollo (NEPAD) ha llegado a Guinea Ecuatorial con la mirada puesta en analizar con las autoridades del país acerca de los objetivos ya conseguidos  y los retos a alcanzar en el programa continental de la Agenda 2063 de la Unión Africana, tras su adopción en la capital etíope de Addis Abeba  el 31 de julio de 2015, durante la 24ª asamblea ordinaria de jefes de Estado y de gobierno de la UA. 

La comitiva, encabezada por su presidenta Nardos Bekele-Thomas,  mantuvo una sesión de trabajo en la mañana de hoy en la sede del ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación en Malabo, la cual estuvo presidida por su viceministro Pedro Nguema Ndong; a quienes secundaban Adoración Salas Chonco, Rufino Ovono Ondo y Francisca Eneme Efua ministros de Pesca, Transportes y de Agricultura respectivamente.

Durante el encuentro en el que presenció el número dos del departamento de Obras Publicas Pascual Ondo Nze Oyana, en consonancia con este marco estratégico continental, se puso sobre tapete el conjunto de proyectos factibles de desarrollo en diferentes áreas de la vida sociopolítica de Guinea Ecuatorial, los cuales podrían ser canalizados a través del Banco Africano de Desarrollo (BAD).

En palabras de  Pedro Nguema Ndong, “Guinea Ecuatorial cree que mucho se ha logrado” desde la puesta en marcha de este organismo. Si bien reitera que su “programa es todavía relativamente joven y tiene la oportunidad de perfeccionarse en el futuro ya que –acentuó-, la institución no representa nada radicalmente nuevo, sino que ofrece un refinamiento de las políticas existentes”.

Por su parte, Bekele-Thomas,   manifestó que  es momento de que África se despierte “a través de políticas puestas en implementación. Tanto es así – matizó-, que la Agenda 2063 de la UA es la mejor en todo el mundo, puesto que supone una hoja de ruta para el desarrollo de todo un continente”.

La erradicación de la pobreza, situando a los países africanos en el camino del crecimiento y el desarrollo sostenible, evitar que África siga quedando marginada del proceso de globalización por conseguir una integración más plena y provechosa de sus países en la economía mundial, son la principales prioridades de la Nueva Alianza para el Desarrollo de África (NEPAD). Proyecta igualmente introducir reformas políticas y movilizar recursos en la agricultura mediante el perfeccionamiento de los recursos humanos, con especial atención en la salud, educación, la ciencia y la tecnología, además de la construcción y mejora de infraestructuras básicas. La diversificación de la producción y las exportaciones, las manufacturas y el turismo, intensificación del comercio intracontinental, la  protección del medio ambiente y el acceso más amplio de sus exportaciones a los mercados de los países más adelantados, son otras de entre sus más ambiciosas intensiones.  

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